sábado, julio 30, 2005

Actores de la crisis

Los habitantes de El Alto

Los indígenas de esta ciudad participaron activamente en las manifestaciones. Fueron el mayor grupo de disidentes en los últimos sucesos y quienes bloquearon carreteras en forma reiterada. Éstos provienen de la extensa zona empobrecida conocida como El Alto, una meseta cercana a La Paz.



Su población alcanza a las 750.000 personas y está formada, en gran parte, por los aymaras que huyen de la miseria en las zonas rurales. Han creado comités zonales que son una fuerza de organización clave y generadora de un fuerte sentido comunitario. Su líder es Abel Mamani.

Las manifestaciones de los habitantes de El Alto jugaron un papel fundamental en la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada en octubre de 2003. Se opusieron a la distribución de agua por parte de empresas francesas y apoyaron la nacionalización de los hidrocarburos, el fin de la economía de mercado y el otorgamiento de mayores derechos para los pueblos indígenas.


Evo Morales y los cocaleros de Chapare

Evo Morales es un indígena aymará que cobró notoriedad como el líder de la unión de cocaleros en la región del Chapare, en el centro de Bolivia. Su partido, Movimiento al Socialismo (MAS), fue el segundo más votado en las elecciones de 2002 resultando electo como diputado. Se opone con dureza a cualquier intervención de EE.UU. en el país, en particular en lo que tiene que ver con la erradicación de las plantaciones de hoja de coca.



Morales ha estrechado fuertes vínculos con el presidente Hugo Chávez de Venezuela, otro motivo por el cual no es muy popular en el país del norte. Se le considera un dirigente menos radical y más flexible que otros líderes indígenas. Sin embargo, recientemente, expresó su apoyo a la nacionalización de los hidrocarburos, algo que consideraba "no negociable" hasta hace un tiempo atrás.


Felipe Quispe y los campesinos

Quispe es un aymará radical y líder campesino del altiplano. Cree en la formación de un Estado aymará independiente y ataca sin pausa a la élite blanca de Bolivia. Adquirió popularidad en 1998, cuando se convirtió en jefe de la poderosa federación campesina, denominada Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB).



Su partido, el Movimiento Indigenista Pachakuti (MIP), obtuvo seis escaños en las elecciones de 2002, pero Quispe renunció para regresar a la militancia de base.

Su retórica radical atrajo el apoyo de los aymaras deseosos de impulsar los derechos indígenas, particularmente sobre la tierra. Pero Quispe, apodado el “Cóndor” o “Mallku” (en lengua aymará), no es considerado una figura clave en las protestas actuales.


Los Mineros

Históricamente, los mineros bolivianos han sido uno de los grupos más militantes dentro del sindicalismo latinoamericano y conforman la columna vertebral de la poderosa Confederación Obrera (COB).



Perdieron militantes y, por ende, poder, cuando 25 mil mineros se quedaron sin empleo a mediados de los años ochenta, debido al bajo precio mundial del estaño. Muchos de ellos se volcaron a otras actividades, como a la siembra de coca o bien al trabajo en minas precarias como parte de diversas cooperativas.

Se mostraron muy activos en la reciente lucha por las pensiones y en las protestas recientes mantuvieron viva la tradición boliviana de detonar dinamita durante las marchas.


Manifestantes de Cochabamba

Cochabamba es la cuarta ciudad en términos de importancia de Bolivia, detrás de La Paz, Santa Cruz y El Alto. Las protestas en esta localidad cobraron notoriedad cuando en el año 2000, lograron que el gobierno diera marcha atrás en una propuesta de venta del suministro de agua a la empresa estadounidense Bechtel. Fue una de las primeras manifestaciones exitosas contra el modelo de economía de libre mercado.



El líder de las marchas de Cochabamba era Óscar Olivera, que hoy es uno de los dirigentes del movimiento que vela por la nacionalización del gas.

Los accesos a Cochabamba fueron bloqueados por protestas en favor de la nacionalización y la conformación de una Asamblea Constituyente.

Indígenas y campesinos de Santa Cruz

Los indígenas de las tierras bajas del departamento de Santa Cruz conforman un conglomerado que tiene sus orígenes a partir de grupos emigrados desde otras partes del país, en conjunto con las etnias locales: guaraníes, ayoreos, chiquitanos y guarayos.

Ellos se han visto involucrados en luchas por la tierra ante la expansión de la forestación, la proliferación de los cultivos de soya y el crecimiento de la ganadería.



La principal organización indígena es la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia (CIDOB), pero también hay integrantes del radical Movimiento de los Sin Tierra (MST), similar a su homónimo en Brasil, que ha ocupado tierras en la última década.

En las disputas actuales varios grupos guaraníes tomaron instalaciones petroleras de la compañía española Repsol y la británica BP, provocando un alto en la producción del crudo.


La élite de Santa Cruz

Muchos cruceños prefieren autodenominarse "cambas", en contraste con los "collas" del altiplano, con el fin de diferenciarse de éstos últimos. Sus demandas por una mayor autonomía se radicalizaron en los últimos meses, en parte, ante la fuerza de la protesta campesina y el riesgo de una nacionalización de los recursos naturales.


Bandera independentista de Santa Cruz

Sostienen que, como parte del sector más próspero de la economía boliviana, deben tener buena parte de los futuros beneficios del gas natural, que se encuentra en su territorio. Tal como señala la cruceña Ana Lía Mancilla, “Santa Cruz es el motor de la economía boliviana y a pesar de que su población se ha incrementado en los últimos años, no nos quieren dar mayor representatividad en el congreso”.

Detrás del Comité Pro Santa Cruz existen organizaciones empresariales y agroindustriales y, asimismo, la región planea un referéndum sobre la autonomía para agosto, independiente de contar con o sin la aprobación del gobierno nacional.

Fuente: BBC

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo solo quiero decir , q en bolivia nos estan matando los militares y el gobierno q trata de ocultar todo culpando a los prefectos , ojala la comunidad internacional se de cuenta de lo que realmente estamos pasando en este pobre pais